viernes, 18 de mayo de 2012

Nuevos desafíos parte 1

Hace varias semanas Franco se está adaptando a grandes cambios estructurales, por así decirlo. Cambios que tienen que ver con sus rutinas diarias (por fuerza mayor para él)y se esta dificultando bastante el tema de ir a dormir. Realmente antes de que llegue el momento de "empezar" con esta rutina me voy anticipando sabiendo que lo que sea que pase, va a estar bien, que yo puedo con esta situación que "puedo acudir a la respiración como ancla" (de mindfulness y Vipassana)visualizo la situación como la deseo, es decir Franco yendo a dormir sin vueltas, o durmiendo plácidamente y aplicando las técnicas de Son rise sobre no reaccionar, no convertirse en un arbolito de navidad etc. y la mayoría de las veces después que Franco se queda dormido, siento una gran paz interior. Ayer fue diferente. A las diez de la noche ya lista, con mi "valijita de herramientas" (esas que mencioné antes)me dispuse gentilmente a decirle a Franco que fuera a su cama. Como es su ritual de estos días escuchó un poco del efecto mozart (un cd que nos recomendó la TO María Rosa Nico y que lo regula), y después me pidió su canción favorita que
es "mariposa traicionera" de Maná. entonces le anticipé que la iba a escuchar un par de veces y después apagábamos el equipo para dormir. Pero Franco evidentemente no quería dormir y empezó a golpear todas las puertas de la casa, a gritar intensamente y a reírse a carcajadas. Sin reaccionar, volvía a llevarlo a su cama y lo tapaba nuevamente. Otra vez Franco se levantaba, golpeaba las puertas, se reía a carcajadas.jugaba con las canillas del baño así hasta entrada la madrugada. Poco a poco las buenas intenciones se me fueron desvaneciendo y otra cosa empezaba a crecer adentro. Me daba cuenta que estaba cerca mi límite. Bears me diría que estaba eligiendo estar así, seguramente, no somos víctimas de lo que nos pasa. podemos elegir otra cosa. Pero también aceptando que estamos haciendo lo mejor que podemos,esta vez no pude elegir otra cosa. Me recuerda a un libro de Elizabeth Kubler Ross en el que ella cuenta como todos tenemos a Hitler dentro. las personas mas sabias lo tienen tan adentro que sale en situaciones muy extremas. Ella misma cuenta cuando, después de varios días sin comer, mientras huía de los nazis, habiendo participado en acciones comunitarias extremas , una nena se acerca en su bicicleta con unos panes en su canasta y como ella sintió deseos de matarla para sacarle los panes. Algunos tienen a su Hitler listo para salir si se les descompone la computadora, o se sienten mal atendidos en la caja de un banco. En mi caso,anoche, Hitler estaba ahí con ganas de hacer algo con este pequeño demonio ( me refiero a Franco, porque a esta altura eran dos los demonios, el otro por supuesto, yo). Finalmente como todo pasa, nada es permanente, Franco se durmió. Hoy evaluando la situación también me pregunté en lugar de por que pasa esto, "para que" me pasa esto y entonces puedo encontrar un montón de razones positivas: Darme cuenta que me falta bastante por aprender. aceptar que hago lo mejor que puedo aceptar que Franco está haciendo lo mejor que puede. soy capaz de observarme y soy consciente. Debo trabajar sobre mi persistencia Debo trabajar sobre mi flexibilidad Debo trabajar sobre mi para que Hitler salga lo menos posible en mi vida.

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